22 septiembre 2013

Lerne leiden ohne zu klagen

(o "aprende a sufrir sin quejarte")

Por otros blogs podría decir que, antes de venir, estaba familiarizada con los llamados "malos días" de una au pair. Días en los que todo está del revés y no hay manera de que nada te salga bien, o días en los que el más mínimo comentario es un ataque y sólo tienes ganas de mandarlo todo a la mierda, hacer las maletas y volver a casa. Pero pensaba que sólo eran eso: días. Días sueltos, separados entre ellos. No días seguidos. No una semana entera.

Ahora que ya estamos a domingo, puedo decir sin duda alguna que esta ha sido, con diferencia, mi peor semana. Siete días en las que mis emociones se han subido a una montaña rusa y han decidido dar por saco. Todo empezó tras mi visita a Koblenz, cuando vi que mi amiga allí tiene una HM que da envidia. Yo, por desgracia, siempre acostumbro a ver (envidiar, más bien) lo bueno que tienen los demás e ignorar lo que tengo yo, así que me empecé a comer la cabeza sin parar. Mi problema era que llevaba dos semanas con mi familia trabajando 40 horas semanales y no había tenido ningún tipo de compensación. Ni más tiempo libre, ni más dinero, ni más nada. Me sentí, de repente, explotada. Empecé a alimentar mi propia miseria con más quejas sobre mi familia que, de hecho, ahora las veo como nimiedades, y convertí un problema, fácilmente solucionable con una conversación, en una gran tragedia. Ya os podéis imaginar el drama. Que si me había equivocado de familia, que si que mala suerte tenía, que si la madre era muy seca (esto es un hecho innegable), etc. Después de regodearme el lunes en mi pena, y tras extensas conversaciones con mi familia (real) y amigos en las que me decían que dejara de comerme los mocos y hablara de una vez con los padres (de aquí), me armé de valor y lo hice. Me recorría un sudor frío. Así de nerviosa me sentía. Si es que todo lo tengo que magnificar yo, de verdad. Al final no fue para tanto, está claro. Acordamos en un momento que el martes los tendría libres de ahora en adelante, salvo media hora en la que tendría que quedarme con la pequeña para darle la comida, mientras la madre va a la guardería a recoger a la mayor. Me pareció un buen trato. Que sí, que siguen siendo más de 30 horas semanales, pero tampoco voy a ser tan estricta, la verdad. Sé que cuando yo necesite algo me lo darán sin problemas. Podéis pensar, lógicamente, que este es el fin del drama. Pues no. A pesar de haber hablado con ellos, seguí sintiéndome muy mal. Tenía muchos bajones, los días se me hacían eternos y aunque fui a mis clases de alemán e incluso quedé con gente, me sentía terriblemente infeliz. Cualquier comentario que me hacía la madre, en su tono habitual, me lo tomaba como un ataque. Las niñas estaban más rebeldes que de costumbre y todo era una discusión: no, no puedes subirte a la mesa, que no eres un mono; no, si quieres ir al parque tengo que ponerte el pañal, cielo, no ves que no puedes ir con el culo al aire; no, no puedes cruzar la calle tú sola como una suicida sin darme la mano. No, no, no, no. Construía mis pensamientos alrededor de los no y toda yo estaba condicionada por ellos. Todo era negativo. Un maldito agujero negro. Tenía jaquecas de tanto llorar y todo. El miércoles estaba ya en el pozo, hundida, y el jueves pensaba que las cosas ya no podían ir a peor.

Pero ha vuelto a salir el sol. Literalmente. Mi cerebro ha hecho clic. Es cierto que todo está en la mente, en cómo te ves tú, en cómo afrontas tú las situaciones. Si te pasas el día regodeándote en lo infeliz que eres, es evidente que serás incapaz de verle el lado bueno a las cosas. No sé en qué momento decidí cambiar el chip, pero sé que cada vez estaba más harta de mí misma y de mi actitud, así que dejé de pensar que trabajar de au pair era un castigo que me había impuesto (pensamiento irracional donde los haya) y me obligué a salir de mi modo croqueta. Asombrosamente, la sensación de desasosiego fue desapareciendo. Ayer salí yo sola a dar una vuelta por el centro, después me fui a comer y luego al cine a ver una película en alemán. La película (City of Bones) ya la había visto en castellano, y en parte gracias a ello pude entender la mayor parte de los diálogos. Salí muy satisfecha de la sala, aunque la gente me miraba raro porque iba sola por la vida. Me hizo mucha gracia porque el chico de la taquilla me dio conversación cuando fui a comprar la entrada, y me supe apañar con mi alemán y todo. Pequeños éxitos, supongo. Hoy, por ejemplo, he ido a Mannheim a una quedada de au pairs. No ha ido como me esperaba, pero me ha dado igual. He vuelto contenta a casa, con ganas de poder cenar con mis padres de aquí. No hemos hablado de política (mañana por la noche les saco el tema sí o sí), sino de mi cumpleaños, que es este viernes y les quiero hacer un bizcocho, aunque la madre se haya ofrecido en hacerlo ella. Mañana empiezo mi cuarta semana aquí, y aunque estas tres han pasado lentas, creo que las que vienen no se me harán tan pesadas. 

Siento la entrada medio deprimente, pero tenía que escribirla. A lo largo de esta semana he pensado muchas veces en dejar constancia en el blog de lo mal que lo estaba pasando, pero me he contenido. No quería regodearme tanto en mis penas, la verdad, y ponerlas por escrito les otorga una importancia que, realmente, no tienen. Soy consciente de que tiene que pasar cierto tiempo hasta que me sienta cómoda y completamente a gusto, y sé que un papel muy importante lo juega la gente con la que quede y los amigos que haga (amigos, que no conocidos), pero también dependerá mucho de cómo esté yo. No quiero volver a sentirme como me he sentido estos días, eso lo tengo claro. Quiero dejar esta entrada para, cuando esté mal, releerla y recordar que, si quiero estar bien, tengo que ser yo la que decida esforzarse por ser feliz. Nadie lo será por mí.

Me despido con una pregunta para mis lectoras y lectores: ¿alguien ha ido a la Oktoberfest de Stuttgart? ¿Merece la pena? ¿Hay mucho descontrol? 


12 comentarios:

  1. Hola, bonita:

    Antes que nada, decirte que te entiendo perfectamente. Yo tuve también una semana de mala suerte en la que todo me salía mal. Vamos, como tú has dicho, un agujero negro del que pensaba que nunca saldría. El mínimo comentario de los niños me tocaba la moral y solo deseaba regresar a casa.

    Pero como tú misma has comentado, lo que importa es tu actitud. Si te mantienes positiva, al final las cosas acaban mejorando, tarde o temprano. Por muy tópico que suene, es así.

    ¿En serio había una quedada de au pairs en Mannheim? Ni enterarme. ¡Qué lástima! Aunque bueno, ayer tampoco tuve mucho tiempo. Mañana sale temprano mi vuelo y el sábado ya estuve por Mannheim de compras. La verdad es que yo no he conocido a ninguna au pair más en estos tres meses que llevo aquí. Siempre quedaba con estudiantes alemanes o con amigos que ya conocía de otros años.

    Un amigo mío estuvo el año pasado en el Oktoberfest de Stuttgart y dijo que le gustó bastante. No está tan aglomerado como el de Múnich, lógicamente, así que supongo que no es muy agobiante.

    ¡Ya nos contarás qué tal te va!


    Muchos besos y ánimo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Bonita tú! Qué maja eres :) Sí, la verdad es que lo pasé muy mal, pero ahora cuando tengo días de bajón o malos momentos, intento recuperarme y cambiar de actitud, porque eso es lo más importante y lo que me hace ver las cosas desde otra perspectiva.
      Tranquila, la cosa tampoco fue para tirar cohetes. Como mínimo quedabas con alemanes o con gente que conocías, eso está genial! Yo aún tengo que conocer a algún nativo :/ A ver si pronto lo consigo, haha.
      Pues intentaré ir este finde, aunque no sé si podré... ya os mantendré informados :)
      Gracias por tu comentario, un beso guapa!

      Eliminar
  2. ¡Pero qué ganas de darte un achuchón, jolines! Los días malos son lo peor, pero si lo multiplicas por siete... No me lo quiero ni imaginar. Como tú bien has dicho, hay que buscar lo positivo y salir de la burbuja de autocompasión y depresión que muchas veces, sin saber por qué, nos creamos nosotras mismas. Dar una vuelta, entender un chiste sarcástico del periódico o ver como alguien se tropieza en la calle (sí, lo sé, es cruel xD) nos pueden sacar una sonrisa inesperada que nos alegre el día.
    Por lo del cine, ya somos dos. El fin de semana pasado fui al cine y me daba la sensación de que todo el mundo me miraba por estar sola. Qué lástima de nosotras xD Yo vi la nueva película de Monstruos S.A., la de la universidad, que ya que me atracaban con el precio de la entrada por lo menos quería entender un 90% de lo que decían jajajaja
    A veces escribir las penas no las hace más relevantes, sino al contrario, expresarlas te hace replantearte si de verdad son importantes. Por lo menos, a mi me ha pasado, tener el problema más gordo del mundo en la cabeza, escribirlo o contarlo en voz alta (a lo lunática que habla sola, sí) y que el drama se vaya haciendo más pequeño.
    Mucho ánimo y pa'lante, bonica! :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. *achucha* Sí, esas pequeñas cosas alegran el día a cualquiera, por muy crueles que suenen xD
      LA GENTE ES MUY RANCIA xD. Qué más les da que estemos solas o no! Quizás vuelvo a ir esta tarde, básicamente para dar una vuelta y salir :) Tengo que mirar qué echan, though.
      Sí, eso también es verdad, escribir a veces hace más pequeño el problema, pero en esos momentos sabía que si me ponía a contar mis penas, al final acabaría incluso peor, así que nada.
      GRACIAS! :***

      Eliminar
  3. Mucho ánimo chiquita!! Todo pasa y lo unico que pueden hacer las cosas son mejorar!
    un besazo! :3
    http://maybetonightt.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar
  4. Es lo más normal tener de esos días o semanas como tú dices.
    Por suerte has podido darle la vuelta a la tortilla. :)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ☆*:.。. o(≧▽≦)o .。.:*☆27 de septiembre de 2013, 12:25

      Pero la tortilla de patatas con o sin cebolla? Also, muy cuajada o con huevo liquido? A ver si nos centramos en lo importante aqui...

      Eliminar
  5. Veo cómo vas haciéndote más grande día a día

    And I'm so fucking happy for that

    ResponderEliminar
  6. No has explicado nada de tu cumple maldita! Y han pasado unos cuántos días ya. ¿Me perdonarás por no felicitarte a tiempo? T_T
    El otro día entré en fotolog (sí sí, en FOTOLOG), época bachillerato-inicios universitarios para ser más concreta y me puse super nostálgica y triste y llorosa y tal. Leí algunos comentarios que me dejabas estilo "tenemos que quedar!" y me dieron ganas de verte y no puedo porque estás a ni-sé-cuántos-km de distancia )=
    Es curioso como no me veo capaz de cuidar de dos niñas alemanas y estar en relativa soledad durante tantos meses pero a la vez te lo cambiaría por mis días grises vacíos de motivación o cosas que hacer

    PD: no te me derrumbes eh? Ese "clic" tiene que prevalecer sobre todo lo demás

    ResponderEliminar
  7. Es Dr.EBHOSE usted puede email él si necesita ayuda en su relación ebhodaghespell@gmail.com
    Te prometo que sus problemas se resuelven de inmediato. Después de estar en
    relación con él durante siete años, me dejó, yo hice todo
    ¿Podré yo hacerle volver atrás, pero todo fue en vano. Quería
    por el amor que siento por él, suplicó, pero él se negó hasta
    explicado mi problema con alguien en línea y ella me sugirió que debería
    más bien por correo un lanzador de conjuros que me podría ayudar a un hechizo que le trajera
    espalda, pero soy el tipo que nunca creyó en hechizos, no tenía más remedio que
    Pruébalo, enviado al taumaturgo, dije no hay problema
    todo estará bien dentro de tres días, mis ex vuelven a mí
    dentro de los tres días, el hechizo fue lanzado y, sorprendentemente, en el segundo día,
    que fue alrededor de las 4:00 pm. Mi ex me llamó, yo estaba tan sorprendido, respondió el
    llaman y todo lo que dijo fue que estaba tan mal por todo lo que pasó,
    quería volver a mí, que me encanta tanto. Yo estaba tan feliz y
    sorprendido. Desde entonces, he hecho la promesa de que todos los que conocemos la voluntad
    nunca tienen un problema de relación, que me voy a referir al hechizo
    lanzador para ayudar. Cualquier persona puede necesitar la ayuda de la máquina de colada, su
    email ebhodaghespell@gmail.com
    También hizo muchos hechizo-like,

    (1) quiere que su ex atrás.
    (2) Usted siempre tiene pesadillas.
    (3) Para ser promovido en su oficina
    (4) ¿Quieres un niño.
    (5) ¿Quieres ser rico.
    (6) quieren mantener su esposo / esposa a ser solo tuya para siempre.
    (7) la necesidad de asistencia financiera.
    8) ¿Quieres estar en control de que el matrimonio
    9) ¿Quieres ser atraído a la gente
    10) La falta de hijos
    11) ¿NECESITA UN ESPOSO / ESPOSA
    13) Cómo ganar su LOTERÍA
    14) HECHIZO DE PROMOCIÓN
    15) HECHIZO DE PROTECCIÓN
    16) HECHIZO DE NEGOCIO
    17) BIEN TRABAJO HECHIZO
    18) cura para cualquier enfermedad / H.I.V.
    Póngase en contacto con él hoy en: ebhodaghespell@gmail.com

    ResponderEliminar