21 febrero 2013

El principio

Escribir ha sido siempre mi vía de escape, mi manera de darle sentido a las cosas. Es inevitable, pues, que decida empezar un blog cuando en unos meses tengo la intención de empezar una nueva aventura: irme de au pair a Alemania.

Antes de explicaros cómo he llegado a esta decisión (de locos), dejadme que os ponga en antecedentes. Estoy acabando mi último año de carrera en Barcelona y llevo meses planteándome qué hacer exactamente con mi vida. Pedí la beca del ministerio para irme de auxiliar de conversación a Inglaterra, porque quiero ser profesora de lenguas en el futuro y sería una buena experiencia, pero a medida que pasaban los meses me iba arrepintiendo. Tengo buen nivel de inglés, sí, pero tengo el alemán abandonado desde hace un año, tengo un A2-B1 patético que no se aguanta por ningún lado y es un desperdicio no poder hablar una lengua que has estudiado, no poder disfrutarla (con lo que me gusta a mí leerlo y verlo todo en versión original) porque me han hecho odiarla gracias a cómo me la enseñaron en la universidad (método gramática-traducción del horror). Al final llegué a la conclusión de que tengo toda la vida para trabajar y ser profesora y hacer un máster, pero ahora es el momento de vivir algo nuevo y diferente, una aventura. Ser au pair es eso y más. Es vivir en el extranjero un año entero (he hecho un Erasmus de tres meses y me supo a poco, lo reconozco), superar el miedo al alemán, sobrevivir al frío (de verdad, no sabéis lo que me asusta eso, será porque soy de Barcelona y aquí nunca bajamos de los 7ºC) y reaprender a ir en bici (ha ha, vaya broma).

Así que ayer (¡ayer!) me apunté a la página de aupair-world y ya he mandado unas cuantas solicitudes y tengo tres o cuatro familias interesadas. Mañana he quedado para skypear con una (aka la familia skype), pero estoy cagada de miedo porque hay dos más que me gustan mucho mucho y no sé por cuál decantarme (no es que me vayan a escoger ya a mí, ya lo sé, pero bueno). Una familia (aka la familia primera) inició el contacto conmigo y, por lo que he visto en su perfil, no han recibido más solicitudes. Son muy majos y han tenido muchas au pairs ya. Le he mandado un mail ahora mismo a la que tienen ahora para que me diga cómo le está yendo la experiencia, y a partir de ahí decidiré. Ellos ya parecen bastante convencidos conmigo, eso sí. Ay.

Luego hay otra familia (aka la familia ideal) que me han enviado la Biblia en verso y tienen unas condiciones ideales: dos habitaciones y baño para mí en un anexo a la casa, con mi privacidad y mis cosas, el curso de alemán de 150 horas semanales y los padres saben un poco de castellano, aunque me han asegurado que hablarían en alemán. Estos sí que han recibido más solicitudes así que supongo que también estarán haciendo selección de au pairs y sopesando posibilidades.

¿Ayuda, ideas, preguntas indispensables que deba hacerles? Escribo este blog también para eso. Antes de tomar la decisión de trabajar de au pair leí blogs de pe a pa que me ayudaron una barbaridad con todo el proceso, así que espero conseguir aportar mi granito de arena con mis historias y poder ser de utilidad también.

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